El rabino Wolf entró por casualidad en un bar; algunas personas bebían, otras jugaban a las cartas, y el ambiente parecía cargado.
El rabino salió sin hacer ningún comentario. Un joven lo siguió.
Sé que no le ha gustado lo que ha visto dijo el muchacho.
Ahí sólo hay pecadores.
Me ha gustado lo que he visto dijo Wolf. Son hombres que están aprendiendo a perderlo todo. Cuando ya no les quede nada material en este mundo, no les restará más opción que volverse hacia Dios.
¡Y a partir de entonces serán excelentes siervos!
1 comentario:
Una forma de contemplar los errores humanos y asumirlos, desde la óptica del creyente.
Un saludo.
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